miércoles, 4 de junio de 2014

White Rabbit.

Supongo que ahora estás en ese momento donde solo quieres llorar, donde quieres que todo sea dramático. Siempre pensaste que lo dramático estaba bien, que lo dramático te ayudaría con todo pero ahora no tienes tiempo para ello, no puedes hacer un drama de todo.
Los días pasan y cada vez te sientes peor, cada día estás más perdido. Parecía divertido probar todas esas cosas, probar cosas que tienen la capacidad de hacerte sentir lo más grande del mundo pero a la vez hacerte sentir lo más pequeño. Parecía divertido, aunque a mi la verdad es que últimamente todo me parece divertido. Es como que una solución aparece en tu vida en forma de sustancia y, sin más, decides probar a ver qué ocurre. Los pensamientos se suceden, viene la euforia y la diversión y sientes como que por fin comienzas a pasarlo bien en los mundos oscuros de la fiesta. Al día siguiente la cosa es más preocupante, no sabes ya quién eres, en quién te estás convirtiendo.
Las cosas últimamente están pasando demasiado rápido y cada vez entiendo menos cómo solucionarlo. Sé que esta entrada está siendo un tanto rara y esto solo parece una sucesión de rayadas mentales que no tienen sentido, pero es más que eso. Es como que necesito ordenar todo esto porque de lo contrario me perderé, me perderle y cada vez hay menos posibilidades de que me encuentre.
La noche avanzó y la sustancia empezó a hacer su trabajo. Parecía bonito experimentar cosas nuevas y esa noche, como yo mismo esperaba, aquello me hizo grande, realmente grande y todo parecía como si estuviese preparado, como si el destino quisiera que todo eso pasara.
Vi a mucha gente bailando, multitud de gente que se apretaba y se empujaba por encontrar su hueco en aquel lugar.Y fue entonces cuando de vi, te pusiste detrás de mí para hablar con alguien. No me lo creía y me puse nervioso, no sabía qué hacer y finalmente decidí saludarle, saludarte pese a recordar al verte todo lo que había pasado.
Todo había empezado hacía unos dos meses, durante unas semanas donde nos vimos con frecuencia y donde parecía que las cosas no iban a salir del todo mal. Pero eso son estupideces que pienso en mi cabeza, igual que siempre, porque por su culpa me he llegado a sentir de lo más estúpido del mundo.
Se suponía que ya habíamos hablamos del tema, se suponía que ya hablamos de si queríamos seguir viéndonos o no. Yo le había dicho que no me diera largas, que si de verdad no quería quedar conmigo que me lo dijera, que no quería seguir haciendo el subnormal si yo en realidad le importaba una mierda. Su respuesta fue que claro que quería que nos viéramos, que claro que le gustaría seguir con esto. Y claro, es una de esas respuestas que no te esperas, que parece que por fin las cosas están saliendo bien y soy yo el único que se está rayando la cabeza.
Pero esa respuesta no se cumplió. Yo estaba feliz, pensaba que después de todo él sí podría llegar a ser diferente, que si había dicho eso sería por algo y que podía de alguna manera fiarme de él. Pasé casi un mes preocupándome por ti, preguntándote que qué tal estabas, solo yo, siempre yo. Y un día, un día en el que las cosas estaban ya bastante mal fue cuando ya decidí pasar de ti y dejar de hablarte. Y aquello me dolió, porque una parte de mí no quería hacerlo pero yo sabía que era lo correcto, que no eras el primer tío que se reía de mí y que ya me había arrastrado demasiado haciendo lo mismo que esta vez con otros tíos pasados.
Debía ser fuerte y dejar de pensar en ti, dejar de hablarte, seguir con mi vida como si nunca hubiera pasado nada pese a que has sido el tío con el que más a gusto he estado.
Pero esas cosas no funcionan conmigo, más que nada porque tengo la absurda manía de querer entenderlo todo y saber qué era lo que había pasado. Todo hubiera sido más fácil si hubieras sido capaz de poner un simple "no me interesas, no me gustas, no eres lo suficientemente bueno para mí" tal y como pronunciaron otros en su momento. Pero la respuesta desconocida hacía que me preocupara y que no pudiera avanzar con todo esto.
Te había dejado de hablar, deseando que lo notaras y que algún día decidieras volverme a hablar. Pero no ocurrió y fue cuando decidí indagar y ver qué había pasado aunque me quedé como estaba: sin respuestas y con tu imagen en mi cabeza pese a que yo sabía que tenía que olvidarte.
Y ahora estaba frente a ti otra vez, con unas copas encima y los efectos de la drogada. Intentaba sonreír, intentaba de veras que él no notara raro en mí. Él me felicitó, era mi cumpleaños, y hablamos de cómo le habían ido los exámenes que en teoría habían sido los culpables de que no hubiéramos quedado. Y entonces fue cuando le pregunté que por qué no me había vuelto a decir nada, que por qué llevaba tanto tiempo sin saber de él. Podía haberme dicho algo, podía haber dicho una frase como las que he dicho anteriormente y haber solucionado todo y, sin embargo, una multitud de excusas salieron de su boca: que si había pasado de todo el mundo, que si había estado ocupado, que si después le dio vergüenza volver a hablarme... Una serie de cosas que no sé si creer o no y que me hicieron preguntar "¿Puedo volverte a hablar?¿podemos volver a lo de antes?" y ahí fue cuando volvió a mencionar lo liado que iba a estar, lo ocupado que estaba y que lo más seguro es que fuera difícil el hecho de volvernos a encontrar.
Me seguía mirando, yo no sabía qué decirle, no sabía qué hacer y fue cuando me besó y nos liamos durante unos instantes. "¿Te veo a las cinco, dentro de dos horas?" y él respondió que lo intentaría, que no estaba seguro pero que lo intentaría.
Nos separamos y no sabía cómo sentirme, no sabía qué hacer y yo quería seguir viéndole, verle a las 5 y nada más pese a que sabía que lo más seguro es que no apareciera, que se estaba riendo de mí otra vez y que tenía la respuesta en eso de que no podría quedar estos días que quedaban de curso. Pero allí apareció, se dio la vuelta desde donde estaba para ir a buscarme, para estar conmigo y allí, en ese local que solo está abierto a altas horas de la noche, nos liamos durante casi una hora entera entre todo el fluir de la gente. "Vente a mi casa" le dije, "vente"... y al final fue allí donde terminamos para mi sorpresa.
Y hasta ahí se supone que las cosas iban bien, que había salido de fiesta y que la drogada y esas copas de más habían conseguido traerle hasta mi casa donde se suponía que estaría bien. Pero fue todo lo contrario, la droga hizo que aquello ahí abajo no funcionara, que por mucho que yo lo intentara mi mente decía que sí pero mi cuerpo no conseguía asimilarlo. Me puse nervioso, me daba vergüenza que él me viera así, había estado esperando aquel momento durante tanto tiempo y ahora tenía que pasarme eso... Habíamos pasado ya demasiado tiempo liándonos y en ese momento debíamos pasar a otras cosas. Yo estaba medio temblando, estaba como asustado porque quería que saliera bien, lo único que yo pretendía era que él pasara un buen rato. Pero resultó que tampoco yo era capaz de conseguir eso. Yo era la cosa más inútil de mundo y así fue como me sentí. Iba a destiempo, no tenía ritmo, su cuerpo y el mío seguían líneas y movimientos diferentes. Lo estaba haciendo mal, lo estaba pasando mal. Todo lo que había aprendido con otros tíos con él no me valía para nada, era como si nunca hubiese estado con alguien. Yo solo quería que estuviera a gusto.
Entonces llegó un momento donde él me dijo "tienes una hora para hacer lo que quieras, después me iré" y supe que debía hacer cosas que nunca había hecho. Estaba asustado, nunca le había hecho eso a alguien y lo único que conseguía era ahogarme y atragantarme. No podía respirar, y por mucho que lo intentaba parecía que no salía bien. Lo peor fue cuando vi que se había quedado dormido mientras yo hacía eso, que mientras yo intentaba que se sintiera bien él se había dormido sobre mi cama. Estabas ahí dormido, tendido sobre mis sábanas mientras yo estaba mirándote con cara de subnormal sin saber que hacer.
Te desperté pasado un rato y te fuiste de mi casa "hasta la próxima" me dijiste, y me dolió realmente ver cómo te marchabas. Después de eso me sentí como una mierda, me sentí la cosa más horrible del mundo porque no tengo ni idea de nada. La jodí completamente con mis drogas y mis nervios y siento que te hice perder el tiempo.
Pese a eso hay cosas que no entiendo, no sé si es real la forma en la que me mirabas, la forma en que me abrazabas. Durante esos momentos era como si las cosas fueran diferentes, eras infinitamente cariñoso conmigo y no sé si son cosas inventadas de mi cabeza o realmente pertenecen a la realidad, pero la manera en que me abrazaste cuando te desperté no sé, me hizo realmente feliz.
Puede sinceramente que yo sea una persona que simplemente esté falta de cariño y que a la mínima que ocurre algo de esto ya estoy inventando lo que me da la gana y pensando cosas que no son. Ni siquiera sé lo que siento por ti. Si releo esto que he escrito va a parecer que eres lo que más quiero en el mundo y que estoy pillado por ti, pero realmente no creo que sienta eso. No sé qué siento, no sé qué sentir, realmente apenas te conozco, no tengo motivos para pillarme por ti pero sin embargo no entiendo qué ha ocurrido del todo.
Hoy te he preguntado que si querías quedar y la respuesta no ha sido otra cosa que otra negativa. Yo quería quedar contigo y una parte de mí siente como si te rieras de mí otra vez. No sé qué pensar sobre ti, no sé si de alguna forma me tienes algo de cariño o, por el contrario, soy esa persona que viste de fiesta y que quisiste en ese momento en el que ibas con unas copas de más.
Igual es que soy muy desconfiado, igual es que lo anterior me hizo daño y siento que está volviendo a pasar lo mismo. No sé qué piensas, no sé qué es verdad y qué no, sé que eres buena persona y sé que en esos momentos eres un cielo conmigo, que eres el tío con el que más a gusto he estado. Pero me mareas, quiero fiarme de ti pero mi mente a veces dice que no puedo.
No sé nada, pero sí sé que cuando nos besamos y cuando estamos juntos parecía que era diferente, parecía que sí que había algo más que un interés y tengo la cabeza hecha un lío. Pese a todo esto parece que lo único que sé es que voy a ser lo suficientemente gilipollas para arrastrarme y preguntarte hasta el último día en que esté en esta ciudad si te apetece pasar un tiempo conmigo, cosa que dudo si sucederá o no.
Estoy cansado de que me ocurra siempre lo mismo. Una amiga me dijo que aprovechara estos momentos, que los momentos de incertidumbre son los más bonitos, pero estoy harto de vivirlos. Estos momentos donde no sé nada es lo único que he vivido hasta ahora y solo quiero saber si va a salir algo bien o mal sin la necesidad de que día tras día mi opinión sobre si saldrá bien o mal varíe tantas veces.
Debo de ser una persona extremadamente obsesiva, una persona que está realmente mal de la cabeza. Quiero una estabilidad, quiero tener las cosas claras, quiero esa estabilidad porque la incertidumbre me mata. Ahora solo estoy preocupado por si querrás saber algo más de mí, por si nos volveremos a ver, cuando se supone que no debería, que lo que debería de hacer es pensar que si quieres quedar yo estaré contento y que si no, no tiene la menor importancia. Y todo esto se junta a más cosas que hacen que me replantee mi existencia. ¿Qué hago aquí?¿Por qué he estado tomando drogas?¿Qué estoy haciendo con mi vida? Son demasiadas las cosas que están ocurriendo ahora mismo y siento que no puedo con todas, que tarde o temprano me perderé.
Y en fin, no creo que nadie se interese por esto, no creo que nadie lea esto hasta el final. Pero simplemente necesito superar todo esto, volver a estar como antes y volver a tener esa sensación de que puedo hacer lo que quiera y dejar atrás a esa sensación en la que mis ánimos disminuyen por el hecho de estar perdido.
Estoy perdido, muy perdido, no solo por estos temas sino también por más. Estoy perdido y quiero encontrarme a mí mismo para sentir que vuelven a tener sentido las cosas.
03-06-2014.

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